El I Congreso de la Blogosfera Sanitaria ha marcado sin duda esta semana. Somos muchos los que tuvimos la oportunidad (y la suerte) de acudir a un congreso tan atípico y, desde luego, nada convencional.
Atípico en el formato de, por ejemplo, las mesas redondas que, de hecho, no recibían tal nombre: eran "blog-storming", como podeis apreciar en el programa. Los ponentes no podían usar power point, por una sencilla razón: la pantalla era utilizada como "muro" donde, en tiempo real, se podían leer - vía twitter - los comentarios tanto de los propios asistentes en la sala - armados con todo tipo de artilugios electrónicos para la ocasión - como de las personas que seguían el evento vía web. Los ponentes podían ver estos mensajes. Para más detalle: ¿En qué consistió el famoso "muro"? Mejor que yo lo explica Rafa Bravo, uno de los padres del evento, en "Primum Non Nocere".
Y, ¿qué tipo de gente había por allí? Médicos, personal de enfermería, economistas, gestores sanitarios, periodistas... Un colectivo muy heterogéneo y difícil de definir. Yo, al menos, no me atrevo. Sí se atreve Mónica Lalanda: "aquello fue una KDD de los médicos 'frikis' del sistema sanitario y organizado exclusivamente a través de la 'web 2.0'. Un conjunto de blogueros es una paradoja en sí mismo, pues si algo caracteriza al bloguero es su tremenda independencia. Es como hablar de un rebaño de tigres".
Mucho se discutió y se reflexionó sobre ese planeta alternativo llamado "blogosfera", un planeta lleno de habitantes anárquicos y a veces deslenguados. ¿Tienen futuro los blogs? ¿Están condenados a desaparecer, como más de uno dijo? ¿Serán sustituidos por "otra cosa"? No lo sé pero a mi, particularmente, no me importa demasiado. Dudo mucho que los blogs vayan a desaparecer y sí estoy seguro que cada vez estarán más integrados con las redes sociales tupo twitter o facebook - de hecho ya está pasando -. Pero mientras haya una persona que piense, con razón o sin ella, que tiene algo que decir y otras dispuestos a leer lo que ésta escribe, los blogs no desaparecerán. La motivación para comenzar un blog y perseverar en su mantenimiento es personal, como dice Vicente Baos en "El supositorio", y obedece también al deseo de compartir conocimiento. Cada blog tiene su público. Este blog, "Pediatría Basada en Pruebas", se dirige especialmente a profesionales sanitarios pero la "población diana" de cada blog es tan dispar como su número (cada vez mayor, por cierto).
Un tema que levantó cierta polémica: ¿Se ha de medir el "impacto" de los blogs sobre la población a la que se dirigen, como también se comentó en uno de los blog-stormings"? Como si fueran, digamos, una "intervención sanitaria". No lo creo. Si lo que en este blog publicamos cada día "sirve o no sirve" a los lectores yo no lo sé y tampoco me importa, ya que aquí lo que intentamos es compartir conocimiento. Unos días los temas serán más interesantes que otros, pero los blogs tienen un valor por sí mismos, no tienen por qué ser un "instrumento para" conseguir algo mensurable.
Control de tiempos. Tanto en los "blog-stormings" como en las comunicaciones fue estricto y riguroso. Tan riguroso y estricto que más de uno se quedó con la palabra en la boca al ser interrumpido de manera firme por haber consumido su tiempo. Me parece perfecto. En España tenemos la manía de enrollarnos como persianas, y pasarse del tiempo asignado es, además de innecesario en la mayoría de las ocasiones, una falta de respeto para quien tiene que hablar detrás de ti. Por ello, en las comunicaciones se implantó el formato "pecha-kucha", del cual yo no había oído hablar en mi vida. Pero es interesante extenderse un poco en su descripción, que se resume en la fórmula "20 x 20": 20 imágenes con 20 segundos por imagen. En total, 6 minutos. No había preguntas. Si las había, se hacían en el pasillo, al acabar la exposición, o tomando un café. aparte de las comunicaciones que hemos colgado estos días en el blog, destacar dos pediátricas: "El médico de mi hij@" (con blog asociado) y "La web de El gipi". Estas y el resto de comunicaciones podeis descargároslas desde la web de la Fundación Gaspar Casal.
Un Congreso de estas características sirve, claro está, para conocer en persona a otros "blogueros" (qué poco me gusta esa palabra). Así, conocí a Amalia Arce, la "Mamá Pediatra", Rafael Pardo, Mónica Lalanda... y a muchas más personas. La lista sería interminable.
¿Habrá un II Congreso? No lo dudo, aunque quizá tendrá una orientación más amplia. Algo así como "Internet y salud" o algo similar. Se vio claramente, sobre todo en el "blog storming" de la tarde, que las posibilidades de Internet aplicadas a la salud son inmensas y están en constante desarrollo. Así que el próximo Congreso será de blogs... y de más cosas.
En esta semana ha nacido, por cierto, un nuevo blog pediátrico: "Hij@s de Eva y Adán", de Rubén García Pérez. Bienvenido al club.
Nos despedimos con música, con otro tipo de "muro" que no tiene nada que ver con el del Congreso. "Another Brick in the Wall", de Pink Floyd. Feliz domingo.
Muchas gracias José Cristobal por tus comentarios.
ResponderEliminarEsperamos poder repetir en ediciones sucesivas corrigiendo todas las carencias de esta.
La gestión del tiempo es un tema crítico. Creo todos echamos de menos mas tiempo libre para hacer "pasillo"/intercambiar con los pares...
No todo puede ser perfecto.
Abrazo
A mi la gestión del tiempo me pareció muy buena y muy conveniente. El programa era denso y los españoles tendemos a extendernos, extendernos, extendernos...
ResponderEliminarEstuvo muy bien, Fernando.
Un abrazo.