Tener que defender, a día de hoy, que las vacunas son eficaces para disminuir la morbimortalidad de muchas enfermedades infecciosas debería ser algo tan obvio como defender que la Tierra gira alrededor del Sol. Claro que hay gente que sigue pensando que el Sol gira alrededor de La Tierra (ojo, que hay gente que lo cree en el año 2013). Y gente que cree que las vacunas son una conspiración medicofarmacéutica para matar niños o algo así.
Dice el titular de "El Periódico": El 5% de los catalanes no vacunan a sus hijos.
No es algo que me pille de sorpresa. Al fin y al cabo, trabajo en Cataluña y es una Comunidad Autónoma en la que los "movimientos antivacunas" gozan de una preocupante buena salud.
Tampoco creo, ni mucho menos, que este fenómeno de la "no vacunación" sea exclusivo de Cataluña. Se da también en otras Comunidades Autónomas y en otros países de nuestro ámbito geográfico. Pero el mal de muchos no es más que consuelo de tontos.
Estos datos son alarmantes y amenazan directamente la consecución de los porcentajes vacunales que aseguran la "inmunidad de rebaño", que permite la no circulación de virus y bacterias en la comunidad, protegiendo de este modo al pequeño porcentaje de niños vacunados en los cuales la vacuna no es eficaz... y que protege también a aquellos niños no vacunados por la irresponsable decisión de sus padres.
Esta entrada no es para hacer amigos. Ya sé que me van a llover, en cuanto la cuelgue, comentarios diversos de las múltiples sectas antivacunas, imbuidas de su ideología conspiranoica que les lleva a decir que "las vacunas causan autismo" (gracias, Dr. Wakefield, su estudio, aún excluido de la revista que en su día lo publicó, sigue haciendo daño), "que porducen muertes, enfermedades" y otras memeces por el estilo.
En pleno Siglo XXI, estar en contra de las vacunas por pensar que son perjudiciales o que son un "experiemento in vivo" con niños", o cosas similares, es como pensar que la Tierra es plana, como muchos creían en la Edad Media. E incluso ahora. Invito a todos estos padres de las diferentes sectas antivacunas que tanto daño están haciendo en nuestro país (brotes epidémicos de Tosferina, de Sarampión...) a que se hagan socios del Club de Amigos de la Tierra Plana. ¿Es ésta una creencia absurda? A mi me lo parece. Igual que defender que las vacunas son perjudiciales para los niños, lo que no sólo perjudica al niño no vacunado (poniéndolo en riesgo de padecer la enfermedad para la que no ha sido inmunizado, lo que para mí constituye una forma de maltrato por negligencia) sino que pone en peligro a toda la comunidad.
Foto de la Tierra Plana. Dedicada a todos los antivacunas que puedan estar leyendo esto.
4 comentarios:
Totalmente de acuerdo! El otro día lo hablábamos con unos compañeros de trabajo.
Llegamos a la conclusión que cuando un padre decide no vacunar a su hijo tendría que pasar por el visionado de un vídeo que refleje que puede causarle a pequeño la enfermedad del que no se le previene. Vídeos parecidos a los de las campañas que hace tráfico.
Cono se dice cada loco con su locura,es icreible que existan personas que esten en contra de las vacunas,como bien has dicho ,asumiendo una posiciòn asi crean solo problemas. Un abrazo. cessione del quinto
Niño no vacunado,niño no escolarizado.
En África, para vacunar enviaban un tiempo a los niños con el ganado a las montañas. El que sobrevivía a los contagios de las enfermedades de las vacas, salía súper fuerte. Eso si: se morían un montón de niños. Nuestro sistema es mejor. Creo.
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