Blog personal, no ligado a ninguna Sociedad científica profesional. Los contenidos de este blog están especialmente destinados a profesionales sanitarios interesados en la salud infantojuvenil
miércoles, 28 de abril de 2021
Comienza el curso de Continuum "Introducción a la investigación 2021"
lunes, 26 de abril de 2021
Guía de Práctica Clínica del SNS: "COVID-19 en Pediatría: valoración crítica de la evidencia"
sábado, 24 de abril de 2021
Cine y Pediatría (589) “La escuela de la vida”, la naturaleza de un cuento social
miércoles, 21 de abril de 2021
"Gefe", ese líder que proporciona felicidad
lunes, 19 de abril de 2021
Comienza el curso de Continuum "Urgencias pediátricas en época estival"
sábado, 17 de abril de 2021
Cine y Pediatría (588). Sin palabras alrededor de la maternidad con “Baby”
miércoles, 14 de abril de 2021
La plataforma de formación Continuum ante la sinrazón de Facebook
lunes, 12 de abril de 2021
Un decálogo de valores del deporte para educar a la infancia en el respeto
sábado, 10 de abril de 2021
Cine y Pediatría (587). Las enseñanzas de “El Mago de Oz”
miércoles, 7 de abril de 2021
Síndrome inflamatorio multisistémico pediátrico (SIM-PedS) asociado a la infección por SARS-CoV-2
He aquí algunos datos básicos para que pueda ser entendida esta entidad de una forma sencilla, no solo para profesionales, sino también para el público en general.
Definición SIM-PedS.
Se han planteado definición con ligeras diferencias entre distintas organizaciones sanitarias (OMS, CDC, etc.), pero de forma simplificada, todas las definiciones comparten 6 características: 1) aparición en la edad pediátrica: en general en niños (<19-21 años); 2) fiebre alta y persistente más de 3 días (aunque en la definición del CDC es suficiente con que dure más de 24 hs); 3) ausencia de un diagnóstico alternativo que explique los síntomas (descartar enfermedades que puedan justificar los síntomas); )4 parámetros de laboratorio con elevación de marcadores de inflamación; 5) afectación multisistémica (de 2 o más órganos o sistemas); 6) relación temporal con el COVID-19 (detección por PCR, serología o exposición).
Desde que se realizan sistemáticamente pruebas diagnósticas (a partir de la segunda oleada), los casos pediátricos de COVID-19 (respecto a los adultos) implican:
· Los casos pediátricos son el 13,5% del total de casos de COVID-19 en nuestro Departamento de Salud (actualmente 1556 casos)
En este momento hay alrededor de 1000 casos recogidos, cuyos datos se comparten también con la red epidemiológica de la OMS. De este análisis colaborativo con un gran tamaño muestral se están realizando los sucesivos análisis que nos ayudarán a entender el comportamiento epidemiológico, clínico y pronóstico de la COVID-19, en general, y del SIM-PedS, en particular, en nuestra especialidad.
martes, 6 de abril de 2021
COVID-19 y niños ¿que hemos aprendido?
Hemos ido aprendiendo a marchas forzadas, empujados por el miedo, la sorpresa, las ganas de saber y con una colaboracion y esfuerzo a nivel mundial sin precedentes. Ahora sabemos más acerca de la infección por SARS-CoV-2 y lo relacionado con los niños: la transmision, el embarazo, el periodo perinatal, los colegios, la clinica, las complicaciones, las pruebas diagnosticas, los tratamientos y las vacunas.
En el último número publicado de Evidencias en Pediatría se revisan los artículos más actuales acerca de la pandemia y la poblacion infantil.
En cuanto a la clínica y los síntomas, los casos graves son poco frecuentes en niños. Cuando aparecen los síntomas, consisten en fiebre y síntomas respiratorios o gastrointestinales leves, es decir como en otras enfermedades producidas por virus tan habituales en la infancia.
La utilización de corticoides en niños podría estar indicada en pacientes con COVID-19 con enfermedad respiratoria grave.
El síndrome inflamatorio multisistémico (SIM) asociado a SARS-CoV-2 es una nueva enfermedad de baja frecuencia, pero potencialmente grave. Aunque la asociación epidemiológica con la infección por SARS-CoV-2 parece clara, se desconoce si existen factores genéticos o ambientales asociados a la aparición de este síndrome. Los sintomas principales son la fiebre, los síntomas gastrointestinales y los síntomas Kawasaki-like. Aunque una mayoría de niños requirieron cuidados intensivos y tratamiento con inmunomoduladores, la evolución fue favorable y la mortalidad baja. En la actualidad todavía no se ha establecido el manejo diagnóstico-terapéutico más apropiado.
En cuanto a las pruebas diagnósticas, en niños hasta 16 años con síntomas compatibles con COVID-19 y menos de cinco días de evolución, un test rápido antigénico negativo no descarta la infección por SARS-CoV-2 y ante este resultado, en una situación de alta sospecha de SARS-CoV-2, es recomendable hacer una PCR.
Las radiografías realizadas en niños con COVID-19 encuentran hallazgos con frecuencia normales o leves, con afectación unilateral, en patrón de vidrio deslustrado y en lóbulos inferiores. La tomografía computarizada (TC) torácica debe reservarse para casos graves o para identificar otros diagnósticos.
En cuanto a la transmisión en el medio escolar, el cierre de las escuelas no tuvo un efecto apreciable en el número de casos de COVID-19 entre los niños. Estos no son un grupo de riesgo importante de la COVID-19 y tampoco parecen jugar un papel predominante en la transmisión de la enfermedad.
Referente a la vacunación, hasta la fecha en la Unión Europea se han aprobado cuatro vacunas frente a la COVID-19, dos de ellas basadas en el ARN mensajero y otras dos en vectores virales: Comirnaty, COVID-19 Vaccine Moderna, COVID-19 Vaccine AstraZeneca y COVID-19 Vaccine Janssen. Las cuatro vacunas han presentado datos procedentes de amplios estudios clínicos de fase 3, que muestran una notable eficacia y un perfil de seguridad aceptable.
Los promotores de estas vacunas, y de otras ya en las últimas fases de investigación han anunciado que han iniciado, o lo harán en breve, estudios específicos para determinar la eficacia y seguridad en niños y adolescentes. La vacuna Comirnaty ha finalizado el reclutamiento y podría presentar resultados preliminares referidos a adolescentes de 12-15 años en poco tiempo. Es el momento de volver la mirada a la población infantil y de dar los pasos (científicos, sociales y políticos) necesarios para contar con vacunas de la COVID-19 seguras y eficaces en ellos en el menor plazo posible.
La posible transmisión a los recien nacidos produjo gran incertidumbre al comienzo de la pandemia, Los estudios concluyen que la infección COVID-19 neonatal es poco frecuente y raramente sintomática. El riesgo de infección no es mayor si el parto es vaginal, el recién nacido se alimenta con lactancia materna o mantiene el contacto con la madre.
Y para terminar la reflexion de los autores de la editorial Sobre Sars-CoV-2 y adultos en pequeño:
"Porque el virus ha cambiado nuestra forma de entenderlo casi todo y de afrontar un hecho tan dañino y diferencial. En el ámbito de la Pediatría este virus ha sido enemigo inesperado. Con menos afectación que en el adulto, menos mal, pero obligando a tener la vista clara y la percepción muy alerta de lo útil. En apenas un año hemos hecho un viaje considerable desde lo que no se sabe hasta lo que ya se entiende y espera. Llegamos a las vacunas y esperemos que después del punto final de este texto nos alcancen más buenas noticias. No sabemos qué pasará, pero sí que será imposible olvidarlo".